miércoles, 30 de diciembre de 2015

Boleros de Caucagua




Es una manifestación más que bicentenaria, originada por la mano de obra esclavizada. Surge de la resistencia de los negros esclavos contra los amos. Los hombres esclavizados deciden revelarse a raíz de que se les otorga un día libre para que tuvieran licencia para festejar y curiosamente en el sector de Caucagua ese día cayó el 28 de diciembre, Día de los Santos Inocentes.
La tradición de la Parranda de los Boleros de Caucagua en realidad dura dos días. La noche del 27 tiene lugar la Lectura del Bando, el cual es una especie de heraldo, donde se designan las autoridades que van a regir el mando de la Parranda y el día 28 salen las Parrandas a recorrer el pueblo.




La estructura organizativa está conformada en su mayoría por mujeres con distintas jerarquías: Jefa Gobernadora de la Parranda, Comandanta de Policía, Policía, Verduga, Fiscal de Bebida, Alcaldesa y Prefecta. La participación masculina está suscrita a los que son los llamados Boleros, personajes estrafalarios que visten con ropas rasgadas, cara pintada de negro y una vara que simula a las que se suelen utilizarse para la extracción del cacao. Los Boleros representan la mano de obra esclavizada (el hombre que se encargaba de la faena en la hacienda) y su misión es realizar una colecta durante el día, ya sea en efectivo o en especie por parte de los asistentes.







En Caucagua existen dos Parrandas: Pantoja y La Linea. La Parranda del sector Pantoja se identifica con los colores verde (simboliza esperanza) y rojo (martirio que sufrieron los esclavizados). Mientras que la Parranda del sector La Línea utiliza los colores Amarillo  (representa el Sol) y Rojo.
La Parranda del sector Pantoja comienza aproximadamente a las 10am del día 28 de diciembre y la Parranda del Sector La Línea inicia su recorrido aproximadamente 45min después.
La Parranda del sector Pantoja tiene más de 200 años. Sin embargo la Parranda del sector La Línea surge años después para representar el “Cruce de Banderas y Encuentro de Bandos y Parrandas” frente a la iglesia al finalizar los recorridos de ambas Parrandas.






Anécdota: Anteriormente, algún niño que era calificado por sus padres como “mal portado”, los Boleros lo metían en un saco, lo llevaban a la bodega y el bodeguero debía pagarle al Bolero simbólicamente el precio del niño. Luego el padre o la madre debía ir a la bodega y pagarle al bodeguero el “costo” del niño para que este pudiese retornar a su casa.


Fuente: Jose Angel Ramirez López, Coordinador de la Red de Patrimonio Cultural del estado Bolivariano de Miranda y Directivo del Bando y Parranda de los Santos Inocentes de Caucagua, sector La Linea.